El camino inglés, una ruta jacobea con encanto, historia y tranquilidad
Hacer el Camino de Santiago es una experiencia maravillosa, una experiencia, un viaje que nos llevará por el camino del autodescubrimiento, ya que el trayecto nos permite conectar, conectar con nosotros mismos, reflexionar sobre nuestras prioridades y sobre la vida misma.
Además, lo haremos andando a través de unos paisajes de una belleza impresionante, permitiéndonos disfrutar de la naturaleza en su máximo apogeo.
Es un viaje que une además cultura y espiritualidad, ya que en el camino encontraremos muchísima historia y muchísima cultura para enriquecernos.
Es una auténtica prueba de superación personal, porque el camino nos va a poner a prueba tanto física como mentalmente, llevándonos a superar nuestros propios límites y afrontando desafíos que nos harán apartarnos de nuestra zona de confort, es por esto, y por mil motivos más que hacer el Camino de Santiago es una experiencia única que te dejará un recuerdo imborrable en la cabeza.
El Camino de Santiago Inglés
Caminos de Santiago hay muchos, pero hoy vamos a centrarnos en el conocido como Camino Inglés, un recorrido que desde Ferrol se puede hacer en 7 días, recorriendo aproximadamente unos 121 km, o desde A Coruña, reduciendo el largometraje hasta los 79 km.
Si queremos hacer este camino deberemos prepararnos bien, ya que se considera que es un Camino de dificultad media, y esto se debe a que las etapas no son excesivamente largas, pero hay algunas subidas y bajadas pronunciadas, especialmente en la primera mitad del recorrido. No se requiere una gran condición física, pero sí estar acostumbrado a caminar y llevar un calzado adecuado.
¿En cuántas etapas se suele hacer el Camino Inglés?
El Camino Inglés se suele dividir en entre 6 y 8 etapas, en él disfrutaremos de una enorme variedad de paisajes, ya pasaremos por la costa atlántica, por zonas boscosas y por diferentes zonas rurales.
Durante la andadura disfrutaremos de un patrimonio histórico y cultural maravilloso, cruzando monasterios, iglesias, yacimientos arqueológicos como el poblado de castreño de Castro de Montealegre, el pueblo fortificado de la Edad de Hierro de Castro de Elviña, la Necrópolis de Os Muiños o la Domus romana de Baia.
Durante el trayecto encontraremos una buena red de albergues, hostales y hoteles en los que descansar.
Se trata de un trayecto bastante bien señalizado, aunque siempre es muy recomendable llevar un buen mapa o guía para orientarnos.
Hemos de tener en cuenta que el Camino Inglés no es la ruta más habitual o popular, hay rutas jacobeas mucho más “abarrotadas”, y si lo que buscas es tranquilidad, el Camino Inglés es ideal, ya que es una ruta que nos permitirá disfrutar de una experiencia mucho más tranquila.
Elementos a tener en cuenta.
Si te decides por el Camino Inglés, recuerda que deberás planificar el Camino con antelación, sobre todo si tienes intención de realizarlo en temporada baja.
Deberemos también ser algo cuidadosos con el clima, y tener en cuenta que según la época del año las condiciones pueden ser más o menos duras, en invierno, aparte del frío, podemos encontrarnos con lluvia, que dificulta y mucho el Camino, y en verano las temperaturas pueden ser bastante agobiantes.
Otro aspecto a vigilar son los servicios que hay durante el Camino, deberemos planificar muy bien las etapas porque el acceso a ellos puede estar algo limitado en determinadas zonas.
Resumiendo
El Camino Inglés es una gran opción para aquellos que buscan una ruta jacobea con encanto, historia y tranquilidad. Su dificultad media lo hace accesible para muchos peregrinos, siempre que estén preparados para caminar y disfrutar del camino.
