Economía

¿Qué es la economía circular?

Tanto el reciclaje como la reducción de los residuos generados por la actividad empresarial son temas fundamentales para la sociedad moderna. Conforme el consumo de recursos se multiplica, la gestión sostenible de los residuos producidos se vuelve indispensable para garantizar un futuro sostenible para la humanidad.

En ese sentido, el reciclaje se convierte en una de las soluciones potenciales a la hora de intentar reducir el volumen de los residuos producto de la actividad empresarial. Reciclar no solo implica recolectar y procesar materiales usados, sino la promoción de un cambio de mentalidad hacia la reutilización de los residuos.

Gracias a la premisa anterior, cobra relevancia el concepto de la economía circular, un modelo de producción que busca eliminar la creación de residuos, fomentando la reutilización, reparación y reciclaje en sustitución de la convencional producción lineal y posterior eliminación de los residuos.

Definición de economía circular

La economía circular hace referencia a un modelo de producción que pretende mantener los recursos en uso por el mayor tiempo posible. Al adoptar este enfoque, se intenta extraer el máximo valor a cada material, recuperando, renovando y reutilizando materiales y componentes que ya no sirven.

Aplicando este proceso, se reduce considerablemente el impacto ambiental negativo que ocasiona la producción industrial, además de generar nuevas oportunidades de innovación y empleo, con la intención de propiciar un desarrollo económico sostenible.

Según la Unión Europea, la economía circular consigue disminuir la contaminación y mitigar el cambio climático al reducir la emisión de gases de efecto invernadero que se asocia con la producción de nuevos materiales.

¿Cuáles son los beneficios de la economía circular para las empresas? 

La economía circular se presenta como una solución realista y una forma ética de actuar por parte de las empresas frente a la problemática medioambiental que afronta el planeta. Entre otras cosas, llega a proporcionar los siguientes beneficios a nivel medioambiental, económico y social:

  • Reduce la presión ejercida sobre el medio ambiente y la necesidad de explotar los recursos, todo lo cual impacta sobre las emisiones de CO2. En general, logra reducir el uso de materias primas y recursos.
  • Sustituir los combustibles fósiles por fuentes de energías renovables acelera la velocidad en que se alcanza la neutralidad de carbono.
  • Impulsa la innovación y permite que aparezcan nuevos modelos de negocio y servicios empresariales basados en la sostenibilidad.
  • Reciclar y alargar la vida útil de los recursos permite mejorar su gestión y evitar que se multiplique la producción de residuos.
  • Minimiza la dependencia de la importación de materias primas y el consumo de recursos en la economía.
  • Protege la salud de los seres humanos y la biodiversidad del planeta al reducir los niveles de contaminación y los residuos de la producción industrial.
  • Permite que las empresas puedan reducir costes al reciclar en lugar de depender de la extracción de nuevos recursos naturales. Adoptar prácticas de economía circular puede hacer que las empresas ganen competitividad en el mercado, pues la cifra de inversores y consumidores interesados en marcas sostenibles se encuentra en auge.

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